Armonía interior
Hace unos años mis emociones no andaban en armonía y comprendí un día que nadie podía ayudarme sino fuera yo misma, pase ayuda psicológica y psiquiátrica pero nada parecía ayudarme hasta que me di cuenta que era yo la que tenía la solución y para eso debía sintonizar mis emociones a fin de curarme y lo primero que hice es identificar de que tenía un problema, luego que quería solucionarlo y finalmente busque las formas; fue así que en un paseo por el centro de Lima encontré un libro de autoayuda y así inicie a leer muchos libros de autoayuda y además empecé a poner en práctica cada receta que ahí decía y encontré que habían muchas personas que habían superado estos trances y comprendí que sería capaz de superarlo, de eso han transcurrido cerca de 18 años y ahora me doy cuenta que pude hacer un gran trabajo, no fue nada fácil pero si tuve que invertir tiempo y dedicación para conseguir manejar mis emociones, aún sigo trabajando en ello y no niego tengo mis baches pero cada vez son más superables.
Cada día se nos ofrecen variadas opciones y si estamos confundidos, podemos experimentar comportamientos peligrosos, dolorosos, tóxicos y hasta equivocadas, en la que quedaremos atrapados en profundas adicciones de las cuales nos será difícil alejarnos (obsesiones, ansiedad, depresión, adicciones etc.) y por ello es que debemos sanar este aspecto fundamental de nuestra vida que significa nuestra esencia, la esfera que nos acompañará siempre por la eternidad y por el cual venimos a perfeccionar en esta vida.
Nunca fui buena para memorizar las lecciones y dada esa razón tuve muchos problemas con enseñanzas memoristas y dada esa razón no encajaba en las escuelas; para mi siendo un Persona Altamente Sensible (PAS) los exámenes eran actos terroríficos ya que podía haber estudiado muchas horas, situación que sabían mis familiares; pero llegaba al examen y la presión hacía que olvidara todo; sin embargo podía tener las más altas notas en la práctica pero ene sta oportunidad no llegue a concretar el puntaje en la teoría para aprobar el examen de conocimientos.
Un tío me vio sufriendo se acercó a mí me abrazó y me dijo ya no llores sobrinita yo creo en ti porque yo te he visto estudiar ¡Se fuerte!. Sé que te atrasarás pero ya no hay nada que hacer solo continuar. Nosotros tu familia te creemos que eres capaz no importa si allá en la Universidad no aprobaste, porque para nosotros tú eres la mejor alumna, la mejor estudiante, eres el orgullo de la familia.
Con lo que me dijo me cambió el semblante y cambio toda mi actitud así que en vez de andar llorando y deprimirme pensé en levantar mis alas para volar nuevamente con más fuerza y cruzar la orilla, pues la lucha recién empezaba.
Quizá hoy puedes tomar esto como tu historia y sentirte como yo, o peor y solo puedo decirte que si yo me levante tú también lo puedes hacer. Hoy te propongo enfrentar este dolor como lo hice yo.
Salir con la frente en alto, con el fracaso sobre el hombro pero siendo digno, pues así salí y me fui a iniciar mi siguiente oportunidad. Al poco tiempo tuve la oportunidad de estar frente a la profesora que me jaló y pude decirle “Profesora gracias por jalarme, por darme la oportunidad de ser una mejor alumna” y me mordí el orgullo.
Si bien es cierto me atrase 2 años de carrera y perdí a mis amigas; pero lo que gané fue mucho más, porque gane a la mejor profesora de este curso, hice nuevas compañeras, tuve muchas experiencias lindas, conocí amigas de todos los niveles de estudios, tuve contacto con nuevos pacientes, protagonice nuevas historias y pude estudiar intensamente como si la vida se acabara, estudie más que nunca y lo mejor de todo es que estudie ya no con miedo sino con determinación con un propósito y con un plan.
Y fue que ahí comprendí que Dios y la vida me habían dado nuevamente esta oportunidad no en vano, sino para ser una mejor persona y a futuro una mejor profesional.
Cada vez que iba a clases lo hacía muy motivada por primera vez estudiaba con alegría y con todo el alma, el corazón. Al poco tiempo egrese de la Universidad para orgullo de mi mami, pues mi papá ya había partido a la casa de Dios.
Nunca fui buena para memorizar las lecciones y dada esa razón tuve muchos problemas con enseñanzas memoristas y dada esa razón no encajaba en las escuelas; para mi siendo un Persona Altamente Sensible (PAS) los exámenes eran actos terroríficos ya que podía haber estudiado muchas horas, situación que sabían mis familiares; pero llegaba al examen y la presión hacía que olvidara todo; sin embargo podía tener las más altas notas en la práctica pero ene sta oportunidad no llegue a concretar el puntaje en la teoría para aprobar el examen de conocimientos.
Un tío me vio sufriendo se acercó a mí me abrazó y me dijo ya no llores sobrinita yo creo en ti porque yo te he visto estudiar ¡Se fuerte!. Sé que te atrasarás pero ya no hay nada que hacer solo continuar. Nosotros tu familia te creemos que eres capaz no importa si allá en la Universidad no aprobaste, porque para nosotros tú eres la mejor alumna, la mejor estudiante, eres el orgullo de la familia.
Con lo que me dijo me cambió el semblante y cambio toda mi actitud así que en vez de andar llorando y deprimirme pensé en levantar mis alas para volar nuevamente con más fuerza y cruzar la orilla, pues la lucha recién empezaba.
Quizá hoy puedes tomar esto como tu historia y sentirte como yo, o peor y solo puedo decirte que si yo me levante tú también lo puedes hacer. Hoy te propongo enfrentar este dolor como lo hice yo.
Salir con la frente en alto, con el fracaso sobre el hombro pero siendo digno, pues así salí y me fui a iniciar mi siguiente oportunidad. Al poco tiempo tuve la oportunidad de estar frente a la profesora que me jaló y pude decirle “Profesora gracias por jalarme, por darme la oportunidad de ser una mejor alumna” y me mordí el orgullo.
Si bien es cierto me atrase 2 años de carrera y perdí a mis amigas; pero lo que gané fue mucho más, porque gane a la mejor profesora de este curso, hice nuevas compañeras, tuve muchas experiencias lindas, conocí amigas de todos los niveles de estudios, tuve contacto con nuevos pacientes, protagonice nuevas historias y pude estudiar intensamente como si la vida se acabara, estudie más que nunca y lo mejor de todo es que estudie ya no con miedo sino con determinación con un propósito y con un plan.
Y fue que ahí comprendí que Dios y la vida me habían dado nuevamente esta oportunidad no en vano, sino para ser una mejor persona y a futuro una mejor profesional.
Cada vez que iba a clases lo hacía muy motivada por primera vez estudiaba con alegría y con todo el alma, el corazón. Al poco tiempo egrese de la Universidad para orgullo de mi mami, pues mi papá ya había partido a la casa de Dios.
Nunca fui buena para memorizar las lecciones y dada esa razón tuve muchos problemas con enseñanzas memoristas y dada esa razón no encajaba en las escuelas; para mi siendo un Persona Altamente Sensible (PAS) los exámenes eran actos terroríficos ya que podía haber estudiado muchas horas, situación que sabían mis familiares; pero llegaba al examen y la presión hacía que olvidara todo; sin embargo podía tener las más altas notas en la práctica pero ene sta oportunidad no llegue a concretar el puntaje en la teoría para aprobar el examen de conocimientos.
Un tío me vio sufriendo se acercó a mí me abrazó y me dijo ya no llores sobrinita yo creo en ti porque yo te he visto estudiar ¡Se fuerte!. Sé que te atrasarás pero ya no hay nada que hacer solo continuar. Nosotros tu familia te creemos que eres capaz no importa si allá en la Universidad no aprobaste, porque para nosotros tú eres la mejor alumna, la mejor estudiante, eres el orgullo de la familia.
Con lo que me dijo me cambió el semblante y cambio toda mi actitud así que en vez de andar llorando y deprimirme pensé en levantar mis alas para volar nuevamente con más fuerza y cruzar la orilla, pues la lucha recién empezaba.
Quizá hoy puedes tomar esto como tu historia y sentirte como yo, o peor y solo puedo decirte que si yo me levante tú también lo puedes hacer. Hoy te propongo enfrentar este dolor como lo hice yo.
Salir con la frente en alto, con el fracaso sobre el hombro pero siendo digno, pues así salí y me fui a iniciar mi siguiente oportunidad. Al poco tiempo tuve la oportunidad de estar frente a la profesora que me jaló y pude decirle “Profesora gracias por jalarme, por darme la oportunidad de ser una mejor alumna” y me mordí el orgullo.
Si bien es cierto me atrase 2 años de carrera y perdí a mis amigas; pero lo que gané fue mucho más, porque gane a la mejor profesora de este curso, hice nuevas compañeras, tuve muchas experiencias lindas, conocí amigas de todos los niveles de estudios, tuve contacto con nuevos pacientes, protagonice nuevas historias y pude estudiar intensamente como si la vida se acabara, estudie más que nunca y lo mejor de todo es que estudie ya no con miedo sino con determinación con un propósito y con un plan.
Y fue que ahí comprendí que Dios y la vida me habían dado nuevamente esta oportunidad no en vano, sino para ser una mejor persona y a futuro una mejor profesional.
Cada vez que iba a clases lo hacía muy motivada por primera vez estudiaba con alegría y con todo el alma, el corazón. Al poco tiempo egrese de la Universidad para orgullo de mi mami, pues mi papá ya había partido a la casa de Dios.